No cabe duda que a la Toy (mi mamá), le pasan cosas muuuy extrañas, pero ¡¡Dios!! Cómo me hace reír a veces. Jajajajajaja…
Justo un día antes de que la operaran, estábamos platicando sobre su refrigerador… Resulta que decidió regalarme el refri para mi casita y ella adquirir uno nuevo, pero no contaba con todas las experiencias que esa decisión le traería…
Un buen día optó por ir a comprar su nuevo refri. A decir verdad no es muy mi estilo. A mí lo que a la línea blanca se refiere, me gusta así; blanca y su refri es negro con gris = S.
Cierto es que uno de mis colores favoritos es el negro, pero no para refrigeradores No sé, me parece que no va con la casa de una mujer… ¡¡Qué sé yo!!. Ideas quizás absurdas que tengo, pero finalmente son mis gustos y los refris desde mi punto de vista deben de ser blancos je. Eso sí, por dentro está lindísimo en unos tonos azules y blancosos. Lo cual indica una refrisionalidad bizarrosa jajajaja.
Pues nada, llegó la Toy con su nuevo compañero gigantoso quien habitaría desde ese día en su cocina y se percató de que no podía ponerlo a funcionar pues la entrada era estilo europeo = S (con tres patitas). Pero pues pensó ¡¡¡Aaaaaah fácil!!! ¡¡le pongo un adaptador!! “Aha, sí, cómo no y tu helado de qué lo quieres?” -le dijo Mr. Refri-: No puedes utilizar adaptadores para conectarme y le sacó un cajón =S (pues como todos sabemos los refris no tienen lengua, así que se valen de los cajones para comunicarse =S) La Toytola sólo pensó… ¡¡Recontraups!!. (En realidad algo similar, porque nuestra forma de hablar es muy distinta je).
Aaaah ya sé!!! -comentó- ¡¡¡llamaré al electricista!!!. Pero no contaba con que él al ver que no había manera de poner un enchufe estilo europeo a falta del cable de tierra le diría “pos le mochamos la patita!!” Jajajajajaja Ay pobrecito Mr. “refrillereitor” tan grandote, masculino y ya lo querían dejar cojito = S.
El electricista le dio muchas opciones pero ninguna profesional o convincente según la Toy… Así que optó mejor por invitarlo a comer pues la hora de la comida había llegado.
La Toy tiene una costumbre que desde que me salí de casa usa más frecuentemente:
Antes de abrir la puerta finge hablar con alguien, deja la tele encendida y cierra el estudio. De esa manera ( según ella ) los trabajadores supondrían que alguien la acompaña en casa. Ese día no fue la excepción, así que luego de hacer su numerito, le abrió al chico quien mientras comían, sacó el tema preguntándole: “Usted habla sola, ¿verdad?”
Jajajajajajaja A mi mami casi se le atora la comida =S, pero aún así pudo responderle: “No, es que hablo con la perrita” Jajajajajajajajaja. Al menos sirvió que se quedara con la kika para echarle la culpa en ese momento jajajajajajaja.
Entonces, pensó en todas las veces que lo había hecho y llegó a la conclusión de que muy probablemente los trabajadores siempre habían concluido que le faltaba uno o mil tornillos jajajajajaja.
Nos dió tremendo ataque de risa jajajajajaja. A mí más, porque mi mami tiene una forma de reírse muy especial y cuando le da un ataque, termina uno riéndose más de cómo se ríe que de lo que le cuenta a una jajajajajaja. Y terminé más feliz aún, pues dicen que 10 minutos de risa intensa, equivale a mil ochomil abdominales, (poquito menos je) Además de que rejuvenece =D. Esos ataques de risa con mi mami son más que geniales!! la pasamos taaan bien!!
El caso es que luego de analizar la situación, llegó a la conclusión de que lo mejor era comprarse un regulador con entrada estilo americano (dos patitas) y donde se pudiera conectar aparatos con entradas estilo europeo…
Pues sucede que va mi mami feliz de la vida a comprar el regulador y al regresar a casa y abrir la cajita zas!!! se encuentra con un letrero tamaño mega con fondo rojo y grandes letras negras “NO CONECTAR REFRIGERADORES” Jajajajajajajajajajajajajajajajaja pobrecita!! jajajajajajajaja Demoniocitos!!! -pensó- ¡y ahora qué hago? Como ese día habíamos quedado de vernos, se fue a la casa de la bolis (mi abuela) y nos contó su problemilla (jajajajajajaja) Ya perdón, es que jajajajajajajajajajajajajaja Esas cosas sólo pueden ocurrirle a dos personas en mi familia, a la Toy y a mi bolis a quienes les ocurren cosas muy extrañas.
Entonces le dije a mi mami: Pues compra otro regulador especial para referís… Buscamos varios días y todos eran para compus y otra clase de aparatos eléctricos. Hasta que se nos ocurrió la brillante idea de ir a Sears y adquirirlo en el área de refrigeradores donde finalmente lo hallamos.
Fue todo taaan sencillo: Llegar, pedir un regulador para refris, que la señorita nos lo diera, pagarlo e irnos. ¡¡Que no me la creía aún!! jajajajaja.
Ahora Mr. Refri está a todo lo que da en la cocina de mi mami… Es tan guapo y grandote!! jajajajajaja :).
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